Un principio después de un Final I
-
Estas segura? - preguntó inquieta, esperando que su respuesta fuese un
"Si", su cabellos se movió con el viento
y removió el dulce perfume que contenía su cuello,
no había duda de la respuesta - Completamente segura - respondió y Rafaela olvido que se encontraba en un lugar público por primera vez y la besó,
puso tantas ganas en aquel beso que incluso el viento festejo aquel
reencuentro.
Había pasado tanto tiempo desde la última vez que Andrea permitía que Rafa la besara, tantas noches
que había soñado con su perdón que se dejo llevar sin
pensar en las consecuencias como siempre lo hacía y eso le confirmo a Andrea que lo qué Rafa prometía era cierto, que estaba dispuesta a
cambiar.
-
Te extrañe tanto - susurro Andrea en su oído y
Rafa sintió que le faltaba el aire, su piel se erizó y dio un gran
suspiro - te amo tanto, tanto tanto - repitió una y otra vez mientras
la abrazaba - yo también mi amor, nunca podría dejar de
hacerlo -.
Y es que en cinco meses que se vieron solo en la mente de la otra
nada había cambiado, era imposible que cambiara, por más que Andrea desistió de la idea de que ella era el amor de su vida y ni por
todo el alcohol que Rafa se metió en el cuerpo pensando en
que olvidaría porqué era lo mejor, porqué por más que trataba de
cambiar su miedo siempre terminaba acorralándola.
Que como empezó todo? de aquella forma, con el miedo.
Rafaela y Andrea fueron el resultado de esas típicas historias de verano, vacaciones
en una ciudad que no era la propia para ninguna de las dos, miraditas cuando se veían pasar y esa interminable búsqueda para
forzar el cruce de miradas, hasta que comenzaron ambas a forzar el anhelado
encuentro "¿será?" decían cada una en su cabeza y mientras Andrea platicaba con su mejor amigo sobre la hermosa morena que
no podía dejar de ver, Rafaela tenía una plática con su
yo interno buscando el coraje para de algún modo acercarse, pero
nunca llego o quizás nunca lo encontró fue la primera vez
en su vida que deseaba ser otra persona, una más valiente al menos, por que el
miedo a que aquella preciosa mujer de tez blanca la rechazara la paralizaba por
completo.
Cuando Rafa había desistido de la idea de intentar hablarle, porque
siendo honesta con ella misma, sabía que jamás se arriesgaría a eso,
menos teniendo a su familia a menos de diez metros de
distancia; ahí estaba Andrea una vez más, aunque esta
vez a parte de su hermosa sonrisa también le regalaba
el vaivén de su mano saludándola Rafa sintió aquel
coraje que tanto pedía recibir y camino hasta ella y con una voz aun
nerviosa pudo decir "Hola". Primera vez que era ella quien se
acercaba a alguien que llamase su atención y aquello fue un impulso
para dejar todos sus miedos de lado y poder tener una fluida conversación con la mujer que más le había gustado en mucho tiempo.
Los días comenzaron a pasar y mientras la distancia para que las
vacaciones acabaran se acortaba, también lo hacia la distancia entre
ellas, pero lo esquiva que era Rafaela le hacia entender a Andrea que no todo sería fácil era increíble como cambiaba de
actitud cuando no había nadie cerca, hasta incluso tomarle la mano a Andrea y correr con ella para nadar en la oscuridad, donde
no había testigo alguno de encuentro, fue en aquel preciso encuentro
donde Andrea quiso dar el más importante paso, aquel
paso que hasta el día de hoy la tenia atada a ese sentimiento que era
imposible borrar, el beso, tomo la cara de Rafa entre sus manos mientras
se mantenían de pie en el agua que cubría sus hombros, Rafaela sonrió de nerviosismo y a medida que la cara de Andrea se fue acercando a la suya, aquella sonrisa fue cambiando por el
deseo de llevar lo antes posible aquel deseo a cabo.
Quizás fueron ellas, o tal vez simplemente la Luna que les regalaba la
mejor luz del mundo, pero aquella noche ambas cayeron en un embrujo,
aquel que tantos llaman maldición y solo pocos lo llaman regalo y a
pesar que a lo largo de su relación ambos significados han sido tomados por las dos, hoy pueden decir que el
regalo sigue ahí el amor siempre estará en ellas,
porque así fue escrito desde el principio de los tiempos.
De ahí en adelante no todo fue color de rosas, primero vinieron
las dudas...
-
Andrea, te vas al otro lado del país, que
haremos con esto - dijo poniendo su mano donde se podía sentir latidos
-
Rafa nada va a cambiar, podemos seguir juntas, nos hablaremos todo el día,
haremos vídeo llamadas por las noches y a penas puedas vienes a verme
o yo voy a verte a ti.
-
No es tan fácil, yo no podre ir a verte cuando quiera, sabes que hay
una familia a la que tengo que responderle
-
Siempre la familia, no se porque volvemos a discutir esto en vez de
aprovechar los pocos días que nos quedan.
-
Quizás lo mejor sea dejar todo como una locura de verano.
Aquello fue como si Andrea hubiese comido ají, la primera pelea, pero después de aquello siempre viene la
primera reconciliación, aunque sea un
día después.
- Lo siento, por favor, discúlpame - decía Rafaela tomando las manos esquivas de Andrea
- No quiero que vuelvas a decir algo así
- Tienes que entender, es la primera vez que siento algo así por alguien y no es fácil saber que se irá a kilómetros de distancia
-
Nunca las cosas buenas son fáciles - respondió Andrea sonriendo coquetamente
- Te quiero - dijo Rafa y eso le dio Andrea valor para pasar al siguiente nivel con un beso, tras otro, en el mismo lugar en el que se encontraban, recostadas en una manta, con el constante sonido de la noche, la luz de la luna y a kilómetros de distancia de cualquier civilización.
- estás segura? - pregunto Andrea mientras recuperaba su respiración y miraba a Rafa desde arriba, Rafa no respondió, al menos no con palabras, tomo la cabeza de Andrea y la beso como nunca antes en su vida había besado, era la primera vez que Rafa llegaba a tal nivel con una mujer y estaba sintiendo mucho más de lo que podría haber imaginado.
Los padres de Rafaela a demás de estrictos eran sobre protectores y claro, después de hacer el amor una y otra vez Rafa despertó con la luz del sol y así pasaron la primera semana sin verse desde que estaban juntas, por más que Rafa suplico que la dejaran salir, eran sus vacaciones y se lo merecía, pero sus padres solo veían el hecho de que había pasado la noche fuera y sus dieciocho años no valían para ellos. Una semana fuera y un día restante para que se acabaran las vacaciones...
- Me voy esta noche - dijo Andrea cuando habían terminado de besarse por el reencuentro
- Como esta noche?
- En una hora me voy
- Andrea, es una broma de muy mal gusto
- No es mi culpa que tus padres te tuviesen encerrada por una semana, que mierda Rafa, ni que fueras una niña
- No voy a perder el poco tiempo que nos queda hablando de mis padres.
- Lo siento, es que te quiero tanto Rafa.
- Me quieres? - pregunto Rafaela tomando el rostro de Andrea
- Mucho.
Una hora exacta tuvieron para declarar todo lo que les faltaba, para planear las visitas que vendrían y en que horarios se llamarían, todo estaba dicho, solo quedaba... la despedida.
- Y si te rapto y nos vamos ahora mismo a una aventura - dijo Andrea secándose las lágrimas que tenía en sus mejillas
- Si fuera así de fácil, yo te ayudo en el rapto
- Llámame a penas me extrañes, cada vez que pienses en mi
- Tu también
- No me quiero ir
- Ni yo quiero que te vayas
- Rafa... dame un beso que me dure toda
la vida - Suplico y Rafaela no tuvo que ser
convencida para aceptar lo que Andrea le pedía.
Las despedidas nunca le habían incomodado a Andrea, pero desde aquel día las odio, con todo su ser, con todas las ganas.
Pasaron exactamente seis meses para volverse a ver, seis meses en que se llamaban tres veces al día y una vez sagradamente por la noche, sin contar los infinitos mensajes que se enviaban a diario Rafaela estaba en primer año de la Universidad y Rafa tenía una muy importante noticia que darle, pero era la primera vez que se veían en un hábitat fuera del lago donde veraneaban y nada sería fácil.
- Andrea, háblame...
- Ahora, dentro de estas cuatro paredes y hace un rato me dejas así, porque había gente al rededor
- Andre, entiéndeme, no es fácil para mí, alguien puede verme y sería un desastre.
- Siempre será dentro de cuatro paredes?
- Las demostraciones de pareja sí.
- Que fácil lo dices, yo no estoy acostumbrada a esto
- No puedo Andrea, perdóname pero no puedo - dijo Rafa alejándose de ella
- Y que haremos? porque si yo me vengo a vivir acá el próximo año tendremos que ver como haremos esto - dijo Andrea haciendo que Rafaela se volviera a mirarla sorprendida
- Me hablas en serio
- Si, no te mereces mucho saber la noticia, pero ya está todo listo, estudiare acá el próximo año.
- Te amo! - dijo Rafaela efusivamente aquellas dos palabras que había guardado por tanto tiempo solo para decírselas en persona, cara a cara; corrió a los brazos de Andrea para besarla y esta olvido el episodio que había vivido en la mañana de aquel día.
Seis meses pasan volando cuando tienes un objetivo en mente, Andrea se iba a estudiar a la misma ciudad de Rafaela, sus padres le pusieron un departamento pequeño a su nombre, lo amoblaron y pusieron toda su fe en que su hija se iba a convertir en una profesional, aunque fuese a kilómetros de distancia de su casa.
Por cinco años, Andrea aprendió que no podía darle la mano a Rafa mientras andaban por la calle, se acostumbro a guardarse las ganas de besarla mientras estaban en público, tres años le costó que Rafa saliera por fin de su casa y se fuese a vivir con ella, aunque "me voy a vivir con una amiga" le dijo a sus padres, ya era un avance para Andrea, porque con los años no solo su comprensión creció por estar al lado de Rafa sino también su amor, su amor se hizo tan grande que no había nada que pudiera destruirlas, nada excepto la misma Rafaela claro...
- Cinco años a la basura Andrea, por una discusión, no te entiendo
- yo no soy quien los bota! - grito Andrea limpiando sus lágrimas que nacían de la rabia - eres tú con tus trancas! primero fueron tus padres, adivina tus padres ya lo saben, ahora es la gente? que nos van a mirar raro, que nos pueden echar, que mierda Rafaela eres tu la única que se avergüenza de nosotras!
- Andrea, querías besarme delante de unos niños, como querías que no corriera la cara
- No vi a los niños para empezar y segundo, el día que queramos tener un hijo no voy a poder tocarte la mano siquiera delante de ellos, que tipo de familia será esa?
- Y que tipo de familia será la de dos madres y un niño Andrea? como puedes pensar en eso
- Me estás hablando en serio? - cuestiono Andrea dando un pie atrás del asombro por lo que acababa de escuchar.
- Andrea, no hace más de un mes que a Agustín lo golpearon porque lo vieron besándose con Javier en la calle, me parece absurdo que la sociedad llegue a aceptar un hijo entre una pareja de homosexuales
- A mi me parece el colmo llevar tanto tiempo con la persona más homofóbica del mundo
- Andrea, tu sabes que te amo, pero aquí en nuestras cuatro paredes, porque el mundo tiene que ser testigo de lo nuestro?
- Porque cuando amas eso es lo que más quieres, gritar a los cuatro vientos que esa es la persona de tu vida, que no hay otra, deseas declararlo y que el mundo sea testigo.
- Andrea...
- Andrea nada, esto se acabo Rafaela - dijo Andrea tragándose sus lágrimas desde el interior
- No, no voy a aceptar que me digas eso - dijo Rafa tomándola de las manos
- Suéltame! - grito Andrea zafándose - yo no puedo aceptar todo lo que me acabas de decir
- Andrea, esto es demasiado difícil para mí, pero por favor no me digas que esto acabo, no conozco esta vida si no es contigo - dijo Rafa llorando.
- Lo siento, esto me duele más a mí que a ti - Limpio sus lágrimas - no puedo seguir perdiendo el tiempo con alguien que nunca cambiara
- eso significa que nuestra relación a sido una pérdida de tiempo para ti?
- No le des la vuelta a las cosas Rafaela, si llegamos a este punto ha sido por tus miedos e inseguridades, no por lo que acabo de decir
- yo estoy segura de que te amo - dijo Rafa bajando el tono de su voz
- Pero aquello no basta, te necesito valiente, que me tomes de la mano cuando paseamos por la calle, que pongas tu brazo sobre mi hombro reclamando que soy tuya, que te pertenezco y que nadie te podrá arrebatar de mí.
la sola idea de hacer aquello le daba escalofríos a Rafaela, por más que tuviese ganas de hacerlo, había algo en ella que se lo evitaba, quizás fueron todas las veces que su madre le grito que aquellas personas "desviadas" eran un peligro, tantas veces que le dijo "no lo mires te puede hacer algo", no lo sabía, lo que si sabía que estaba a un minuto de perder a el amor de su vida y todo parecía una pesadilla en aquel momento.
- perdóname - dijo Rafa tomando sus cosas - no puedo ser quien tu quieres que sea.
Aquellas palabras no significaban otra cosa para Andrea más que "Adiós", Rafaela se marchaba sin siquiera mirarla y sentía que al cerrar la puerta perdía su vida, mientras Andrea lloraba sobre su cama, Rafa se desvanecía en llanto en el pasillo del edificio, cinco años de relación se acababan en una mañana, ambas desearon no haber despertado aquel día.
Durante el primer mes Rafaela tenía la esperanza de que Andrea la perdonara, que el hecho de que la extrañaba fuera más grande que lo pedía de ella, pero esto no paso, entonces le pidió a su más cercana amiga que fuera por sus cosas al departamento - no soy capaz - dijo pidiéndole que fuera; aquello fue una puñalada más para Andrea, la que tenía esperanzas parecidas a las de Rafa, pero ella deseaba que Rafaela abriera su mente y dejara todas sus trancas de lado, para poder estar juntas, después de aquel día ambas esperanzas murieron y con ellas se fueron cinco meses de distancia.
- Rafaela? - preguntaba Andrea mientras veía a una muy diferente Rafa sentada en la barra de un pub alternativo.
- Andrea! - dijo efusivamente la morena abrazando a Andrea
- Nunca pensé que te encontraría aquí - se alejo de aquel abrazo y tomo el pelo corto de rafa
- Lo corte
- Se te ve bien
- Tú crees?
- Si, bastante bien - dijo Andrea con un dejo de nostalgia en su voz - estás sola? - preguntó
- Con una amiga - se podía ver la desilusión en la cara de Andrea - está afuera esperando a su polola - adhirió Rafa y la cara de Andrea volvió a sonreír.
- Cuanto tiempo ha pasado - pensó Andrea en voz alta
- Cinco meses y un poco más - respondió de inmediato Rafaela
- Cuanto tiempo pasara para que te vuelva a ver? - pregunto con la tristeza suficiente para hacer que Rafa se estremeciera, pero su amiga llego y rafa no pudo responder.
- Las dejo - dijo despidiéndose Andrea, pero solo con Rafa se despidió cálidamente
- Andrea! - alzo la voz Rafaela cuando Andrea ya se acercaba a la gente con la que había llegado ahí
- Dime - respondió a su llamado dándose la vuelta
- Te juntarías conmigo a platicar... un día de estos - Andrea sonrió con aquella pregunta, pero también temía, sabia lo que podía significar un reencuentro entre ambas
- Fecha y hora - respondió de inmediato
- Mañana a las cuatro?
- En la plaza? - propuso Andrea
Rafa respondió con una gran sonrisa y se volvió a
despedir de ella; parecía que las horas no avanzaban para ninguna de
las dos, había un miedo en ambas, para Rafa era un miedo diferente al
de siempre, era el miedo a no saber tomar la oportunidad que le daba la vida de
volverla a ver y sentirse nuevamente perdida. Para Andrea los miedos eran obvios, intento no hacerse ilusiones, pero el verla en un pub de ambiente, ya era un cambio en Rafa.
El reencuentro fue tan tranquilo y refrescante, que no pudieron recordar la
forma en que no se miraron al despedirse aquel fatídico día, Andrea disfrutaba con todo lo que Rafaela le contaba y
esta sentía lastima por sí misma, por no haber estado en aquellos
momentos que Andrea le relataba.
- Has estado bien entonces, me alegro por eso - dijo rafa buscando en la
mirada de Andrea respuestas de preguntas
que le aterraba hacer.
- Si, no puedo decir lo contrario, pero dime tú en un lugar gay, me asombro verte ahí dijo Andrea, Rafaela esbozo una pequeña sonrisa
- Muchas cosas han cambiado en mi, no solo mi pelo - Andrea acaricio el rostro de Rafa
- Me doy cuenta - quito su mano y con tristeza continuo - lástima que no
haya sido antes
- Tan rápido me olvidaste?
- No se trata de olvidar, sabes bien que eso es un proceso largo
- Andrea, debo preguntar - dijo afirmando la
cabeza en su mano - estás con alguien?
Andrea, la miro y no supo si responder o del
todo callar por el atrevimiento de preguntar eso, si ni
siquiera había podido pensar en la idea de tocar otra mano, mucho
menos hubiese podido estar con otra persona
- No, no te voy a responder eso
- Porque? - pregunto Rafa riendo
- Porqué no me da la gana y punto
- Ah... muy bien
- Sigues igual de tonta - dijo Andrea molestando
- Contigo al lado florecen viejas costumbres
- Así? como cuales
- Como las ganas de subirte esa polera, mira tu escote, la
gente pasa y se va directo ahí - dijo evitando mirarla
- Esos son celos y tus celos son los peores del mundo
- respondió acomodando su polera pero dejando más a la
vista que antes - Ahí si? dijo atrayendo su mirada
- Andrea... - su voz y su cara era el mejor de los
chistes para Andrea que rio a carcajadas cuando hablo - tápate - dijo subiendo la polera y rozando levemente los dedos con la piel que cubría aquellos
voluptuosos montes, Andrea sintió como se le erizaba la
piel al contacto.
- disculpa - dijo Rafa sonrojada
- tonta - insistía una vez más Andrea mientras reía.
La tarde termino entre bromas y risas, pidiendo en silencio un nuevo
reencuentro sin pedirlo
- aun tienes el mismo número? - pregunto Andrea
- el mismo y tú?
- lo cambie - respondió.
Intercambiaron números de teléfono pero no
citaron ningún compromiso. Andrea camino hasta su auto y Rafaela camino para tomar un taxi, la
despedida había sido sencilla tranquila y sin aderezos,
pero la partida fue difícil para ambas, volver a estar cerca de algo
que quieres con tantas ganas y que luego te lo quiten no es
una sensación muy agradable.
Los días pasaron y llego un punto en que Rafaela no aguanto más
y envió un mensaje, aquel mensaje se transformo en cientos a la
semana y luego pasaron a ser llamadas, Andrea la llamaba en la mañana
y Rafaela cuando se iba a acostar. La magia de aquel
embrujo de una noche de luna seguía ahí,
nada había cambiado salvo ellas, pero los cambios que son para mejor
siempre vienen bien.
- Quiero verte - decía a un extremo de la línea Rafaela
- Esta semana no tengo tiempo para nada - respondía Andrea
- Ni siquiera media hora para mí?
- Quince minutos, mañana quizás.
- Estoy mendigando tu tiempo, te das cuenta? - dijo irónica Rafaela
- Lo tomas o lo dejas - respondió Andrea
- Lo tomo.
La hora acordada llegó y Una nerviosa Rafaela esperaba a Andrea impaciente sentada en la misma plaza de siempre
- Llegas diez minutos tarde - dijo Rafaela antes de saludarla
- Eso significa que nos quedan cinco minuto! - molesto Andrea
- Hola - Rafa besó su mejilla
- Hola
- de verdad te quedaras cinco minutos?
- No, tontita, como se te ocurre
- Pesada
- Tú me empujas a eso
- Andrea, necesito hablar contigo - dijo sin
rodeos.
- Al hueso! deja que me siente primero
- Andre, yo... en todo este tiempo, yo no he
dejado de sentir esto que tengo aquí en el pecho que parece que va a
explotar cada vez que me llamas, cada vez que un mensaje tuyo me llega, yo
necesito saber que es esto
- Si mi respuesta es que "esto" es retomar algo que dejamos y lo
convertimos en una amistad que me dirías
- Que esta va a ser la última vez que nos veamos
- Por qué?
- Primero porque duele demasiado, segundo porque
no volveré a vivir algo contigo a distancia, aunque sea una simple amistad
- A distancia? Rafa vivimos en la misma ciudad
- Andre... - Rafaela se acomodo hasta quedar
frente a ella, tomo sus manos y el tacto la estremeció -
tu... reconsiderarías en algún momento darme una
oportunidad, retomar lo que teníamos e intentarlo una vez más?
- Rafa... - dijo ella soltándose de las manos que
la tenían y parándose - No puedo decirte que deje de sentir
por ti, porque sería mentirte en la cara, pero eso no significa que mis motivos
para terminar todo lo
que había no estén aquí presentes.
- Yo no soy la misma de antes Andrea
- Y quien me asegura a mí que eso es así
- Yo, no te basta con mi palabra
- Rafa, yo no pudo volver a pasar por lo mismo - dijo Andrea sentándose otra vez
- Si nos reencontramos en donde lo hicimos no
fue porque un día desperté y dije ahora puedo frecuentar pubs gays, Andrea yo viví un proceso largo, desde
el momento que entendí que aquello
que teníamos había acabado por mi culpa, yo no pude aceptarlo,
fueron sesiones dirías con psicólogos, intentando hallar
la raíz de mis problemas y lo que descubrí fue la cura a
ellos, que tu ausencia dejo un vacío tan grande en mi que todo
aquello que tu despreciabas desapareció y no te puedo asegurar que te
besare en cada rincón de la ciudad o que seré capaz de
tomar tu mano cada vez que salgas conmigo a la calle, no lo se porque no lo he
intentado antes, pero si te puedo decir que soy capaz de pensarlo, que ya la
idea no me molesta ni mucho menos me aterra, la idea de poder sostener tu mano
y gritarle al mundo que aun te amo me llena de
ansiedad, porque llegue el momento en que lo pueda hacer.
- Estuviste con psicólogo?
- Lo que tenia era demasiado grande para arreglarlo yo sola,
estaba lo que dictaba mi corazón con lo que mi
cabeza decía que era correcto y era la única salida
- Rafa... no se si el día de mañana te pueda dar esa oportunidad
que me pides - dijo tomando la mano de Rafaela
- Esto es todo lo que me permitirás las llamadas, los mensajes
una amistad - dijo Rafaela haciendo las paces con
lo que ella misma decía
- Tal vez más adelante, con el tiempo y no lo digo para ilusionarte,
pero salí demasiado dañada de esto para volver a intentarlo ahora
- Te entiendo bonita, te prometo que lo hago
- Mi amistad esta aquí, a tu disposición, siempre - dijo Andrea dudando de lo que ella misma decía,
- Gracias - respondió Rafaela con una gran forzada
sonrisa - me tengo que ir ahora
- Acabo de llegar, pensé que era yo la que no tenia tiempo
- Tu habías dicho quince minutos, llevamos más de media
hora aquí - continuaba sonriendo
- Me llamaras esta noche? - Andrea tenía miedo que la
respuesta fuese un no
- si, te llamare - respondió Rafaela depositando un beso en
la frente de Andrea y caminando sin
mirar atrás.
La partida de Rafaela le trajo a Andrea el recuerdo de la primera vez que Rafa se marchaba sin mirarla, la noche
llego y por más que espero que su celular sonara este permaneció sin
llamadas entrantes, "debe estar molesta" pensó pero
molestia era lo que menos había en Rafaela,
rabia había y mucha, pero por ella misma, por haber actuado tarde,
cuando ya no había nada que pudiera hacer.
Una semana aguanto Andrea sin recibir llamada de Rafaela y por más que ella llamo la otra no contesto, Rafaela miraba las llamadas
entrantes y el sonido mismo del celular le afectaba, cuando ya se canso de
llamar y no recibir respuesta comenzó a buscar donde vivía Andrea llamo incluso a la madre de Rafa, pero no le quiso
dar información casi a punto de desistir intento buscar en las redes
sociales, hasta que llego a una dirección tomo su bolso
y corrió a verla, había cometido un
error rechazándola cuando lo único que quería era
estar con ella.
Llego a la dirección indicada y vio a la amiga de Rafaela con la que se había encontrado en el pub,
- Hola, disculpa tu eres amiga de Rafaela cierto?
- Andrea, llegas tarde - dijo seriamente Rayen, la
amiga de Rafa
- Tarde por qué?
- Rafa se fue a despedir de los padres
- Como a despedir a donde se va?
- Que haces aquí Rafaela? - pregunto confusa Andrea
- y tú no te habías ido - dijo Rayen
- Se me quedo la cartera - respondió Rafa
- voy por ella - Rayen se marcho y Andrea estaba cien por ciento desconcertada
- A dónde vas? - pregunto Andrea
- Mejor dime que haces aquí
- llevas días sin contestar, sin llamar - respondió aun
con desconcierto - necesitaba saber de ti
- No pude contestar, lo siento, estaba ocupada
- Te vas?
- Si
- Porqué? donde te vas? por cuánto tiempo
- Aún no lo se, un año, dos, me ofrecieron un trabajo, tenía dudas sobre
aceptarlo pero al final lo acepte
- Cuando lo aceptaste?
- El lunes pasado - respondió Rafaela y Andrea entendió que su partida era por su respuesta
- Porqué no me lo dijiste?
- habrían sido distintas las cosas de haberlo dicho?
- Rafa yo no quiero que te vayas
- eso era lo que no quería, presionarte para que tomaras una decisión
- pero lo decidí mucho antes Rafa, pase una semana
sin oír tu voz y fue como volver a revivir el día en que te marchaste
de casa
- Andrea...
- Rafa yo quiero estar contigo
- Estás segura?
- Completamente segura
Los minutos pasaron y nada importo, el beso duro infinitamente, personas pasaron al rededor y las vieron, pero daba exactamente lo mismo, Rafaela se sentía la mujer más feliz del mundo y Andrea sentía como el alma le volvía al cuerpo luego de tanto
tiempo.
Las cosas serían distintas de ahora en adelante, Rafaela no era la misma y Andrea lo sabia, estaba segura
de eso, ya no tenia que fruncir el ceño porqué rafa le esquivara la mano en
plena calle, no, ahora era rafa quien entrelazaba sus dedos, era ella quien
la quería besar a cada momento y en cada lugar, era como si
se volvieran a conocer, en cada palabra, en cada gesto y con cada acción,
por un mes vivieron la más dulce luna de miel. Rafa se mudaba a la casa de Andrea y la ilusión de ambas se hacia presente en cada mirada, pero la
felicidad no puede durar toda la vida, en algún momento tenia que
pasar algo que las trajera una vez más al principio después del
final, como en un ciclo de nunca acabar, porqué el amor no lo es todo en al
vida, son muchas más condiciones las que determinan una relación
y ahí estaban de nuevo en el punto de partida... viviendo la primera
pelea.
Nota:
Primero: Muchas gracias por darse el tiempo de pasar a leer
Segundo: Gracias por sus comentarios anteriores y espero que disfruten esta nueva entrega
Tercero: Sus comentarios alimentan mi escritura :)
"porqué el amor no lo es todo en la vida, son muchas más condiciones las que determinan una relación"
ResponderEliminarCuan cierta es esta frase ... en toda relación hay peros, miedos o dudas, depende de cada uno dejar que nos arropen y nos empañe la posibilidad de ser felices o darles la vuelta para encontrar el equilibrio entre lo que queremos, lo que podemos dar y lo que estamos dispuestos a sacrificar para lograrlo. Tremendo dilema ¿no?
Kam
No podria escoger cual de tus historias es mi favorita...
ResponderEliminarOhhh pero que onspirada mujer 3 historias, bueno yo feliz de leerlas,espero la conti pronto
ResponderEliminarme encanto, espero la continuación :) saludos, bso
ResponderEliminarcomente desde el cel, y no se publico, piche bb, bueno en fin no se cual de tus historias es mi favoritas, me encantan todas, espero la continuación pronto.
ResponderEliminarEs muy cierto lo que dices, hay muchas cosas que determinan si una relación funciona o no, aparte del amor, no lo es todo lamentablemente.
que bueno que tengas la imaginacion en todo lo alto,me encanta ,nos estas acosumbrando a leerte seguido,para mi mejor tus historias me entretienen mucho,me hacen acordarme de epocas pasada en mi vida,espero que las continuaciones no demoren . besos
ResponderEliminarBuena historia.
ResponderEliminarBueno se supone que todos los viernes hay capi de des cero no?? hoy es sabado ya y nos estas debiendo la tercera parte, espero que la subas pronto y no haya que esperar otro finde, saludos y que estes bien
ResponderEliminarque paso? dijiste que los viernes ibas a subir el relato y hoy es lunes y nada, espero que estes bien,. besos
ResponderEliminar